Tranquilidad bajo el significado de comodidad y calma del pensamiento en la vida, es una verdad agradable que el Islam elogió y determinó senderos para llegar a alcanzarla. Algunos factores para alcanzar la tranquilidad registrados en nuestros textos islámicos corresponden a: el recuerdo de Dios, la buena opinión, la confianza en sí mismo, apartarse de los deseos inalcanzables, el matrimonio, tener orden en la vida y en los actos, utilizar la noche para descansar, consumir alimentos saludables y naturales (las uvas negras), la limpieza (lavar la cabeza, lavar las ropas y otros). Ante estos existen numerosos factores que obstaculizan la realización de la tranquilidad, tales como: la inclinación y el apego hacia el mundo, la codicia, la envidia, la duda e incertidumbre, la avidez y otros.
En conclusión, en nuestros textos religiosos fueron mencionados los medios para alcanzar la tranquilidad, y este mismo asunto es la mejor razón para poder llegar a ésta. Además de ello, al estudiar la biografía de los grandes sabios que obedecieron las órdenes religiosas y llegaron a encontrar la tranquilidad interna, puede guiarnos hacia esta verdad que la adquisición de la tranquilidad en la vida no es un lema, asunto que podemos percibir y experimentar dentro de nosotros mismos al realizar las órdenes religiosas.
Tranquilidad significa calma, serenidad y quietud interna, que ante esta se encuentra la preocupación, ansiedad e inquietud.
Desde el punto de vista del Islam la tranquilidad y la comodidad son un asunto real y una verdad alcanzable. En nuestros textos religiosos fueron mencionados los medios para alcanzar la tranquilidad, y este mismo asunto es la mejor razón para poder llegar a alcanzarla. Además de ello, al estudiar la biografía de los grandes sabios que obedecieron las órdenes religiosas y llegaron a encontrar la tranquilidad interna, puede guiarnos hacia esta verdad que la adquisición de la tranquilidad en la vida no es un lema, asunto que podemos percibir y experimentar dentro de nosotros mismos al realizar las órdenes religiosas.
Factores del surgimiento y la creación de la tranquilidad:
El Generoso Corán y las narraciones mencionaron diversos factores para la tranquilidad. Algunos de estos corresponden a:
1. Invocar y recordar a Dios: En el Generoso Corán dice: “…aquellos que creen (recuerdan a Dios ) y tienen sus corazones tranquilos”.[1] El propósito de recordar e invocar a Dios es que el ser humano siempre considere y tenga seguridad en que en el Universo no existe criatura alguna que pueda tener existencia independiente y separada a “Al.lah”, qué decir que pueda ser el origen de los efectos: “Pues, en verdad, el poder y honor pertenecen por entero a Dios”.[2] Y todo el poder, los bienes y la existencia son de Él. El honor y la indignación de los siervos también se encuentran en Sus manos. Él es poderoso sobre todas las cosas.[3]
Una persona así no tiene ninguna preocupación, temor, ni melancolía; al igual que el Corán dice: “…quienes sigan Mi guía no habrán de temer ni estarán tristes”.[4] En efecto si el ser humano realmente con todo su ser cree que en el mundo no existe ningún cambio ni poder a menos que dependa de Dios Altísimo y Majestuoso, y entonces diga «لاحول ولا قوة الا بالله» –“No hay poder ni fuerza sino en Dios” no tendrá ninguna preocupación ni inquietud.
El honorable Profeta del Islam (s.a.w.) dijo: “Decir «لاحول ولا قوة الا بالله» es la curación de 99 dolores que el más mínimo entre estos es la tristeza y angustia”.[5]
2. Resignación en Dios: Tawakul (confiar) significa que el ser humano realiza sus obligaciones en la medida de sus poderes, y sus resultados los deja en manos de Dios. El Generoso Corán dice: “Y quien confíe en Dios tendrá suficiente con Él”.[6]
3. Satisfacción del deseo Divino: Si la persona mantiene la creencia de que Dios Sublime siempre desea lo mejor para Su siervo, y acepta y obedece el deseo de Dios no tendrá ningún problema.
4. La relación y la obediencia a los santos Divinos: Dios dijo a Su Profeta: “Toma de sus riquezas una limosna para limpiarles y purificarles por medio de ella y reza por ellos. En verdad, tu oración es una tranquilidad para ellos”.[7]
5. Casarse con un cónyuge creyente y recto: El Generoso Corán dice: “Y entre Sus señales está el haber creado de vosotros mismos parejas para que encontréis la calma junto a ellas”.[8]
6. Descansar por la noche: Dios Sublime en el Corán dice: “Él es Quien ha puesto la noche para que reposéis en ella”.[9]
7. Comer alimentos saludables y naturales: En las narraciones dice que comer uvas negras[10] termina con la tristeza y el desconsuelo.
8. Limpieza y purificación: En numerosas narraciones dice que lavar la ropa[11], lavar la cabeza[12] y otros provoca el término de la tristeza y el sufrimiento. Estos fueron algunos factores mencionados en la aleya y narraciones que provocan tranquilidad.
Por otra parte si el ser humano se aleja de aquello que obstaculiza la tranquilidad y para el ser humano trae perturbaciones proveerá el campo para la comodidad y el sosiego. Algunos de los factores que provocan el término de la tranquilidad indicadas en las narraciones corresponden a:
1. Apego al mundo: El gran Profeta (s.a.w.) dijo: “Para el deseo y el apego a lo mundano provoca tristeza y melancolía, y la continencia e inapetencia hacia el mundo provoca comodidad del alma y del cuerpo”.[13]
El Imam Jomeînî (en paz descanse) también considerando las narraciones dijo a su hijo Hayy Sayyid Ahmad: “…de lo que observé y estudié en los diversos estratos llegué a esta conclusión que los estratos poderosos y acaudalados padecen de más sufrimientos internos, espirituales y anímicos que los demás estratos, y como consecuencia de las numerosas aspiraciones que no llegaron a realizar se encuentran mucho más abatidos y con el corazón más desgarrado… Aquello que provoca la salvación de los seres humanos y la tranquilidad de los corazones, es la emancipación y la separación del mundo y de los apegos a éste que se obtiene con la invocación y el recuerdo constante de Dios Sublime”.[14]
2. Codicia y avidez hacia los bienes de la gente: El gran Profeta (s.a.w.) dijo: “Aquel que tenga avidez y codiciosamente desee los bienes de otros, su melancolía y tristeza serán largas”.[15]
3. Envidia: El Imam ‘Alî (a.s.) dijo: “Fuera del envidioso no he visto a un opresor que se parezca tanto a un oprimido, puesto que tiene corazón triste y constante melancolía”.[16]
4. Duda y falta de satisfacción: El Mensajero de Dios (s.a.w.) dijo: “En verdad que Dios con Su sabiduría y favor colocó la comodidad y la felicidad en la certeza y el acuerdo, y la tristeza e incomodidad en la duda y la insatisfacción”.[17]
Entonces alcanzar la tranquilidad no es sólo un lema sino que es una verdad alcanzable que cuenta con numerosos senderos prácticos, mencionados claramente en los textos religiosos.
[1]– Ar-Ra‘ad [13:28]. – «الا بذکر الله تطمئن القلوب».
[2]– An-Nisā’ [4:139]. – «ان العزة لله جمیعاً»
[3]– Āle ‘Imrān [3:26].
«قُلِ اللَّهُمَّ مالِكَ الْمُلْكِ تُؤْتِي الْمُلْكَ مَنْ تَشاءُ وَ تَنْزِعُ الْمُلْكَ مِمَّنْ تَشاءُ وَ تُعِزُّ مَنْ تَشاءُ وَ تُذِلُّ مَنْ تَشاءُ بِيَدِكَ الْخَيْرُ إِنَّكَ عَلى كُلِّ شَيْءٍ قَديرٌ».
“Di: «¡Oh Dios, Soberano de todo gobierno! Tú das el gobierno a quien quieres y se lo quitas a quien quieres y das poder a quien quieres y humillas a quien quieres. En Tu mano está todo bien. En verdad, Tú tienes poder sobre todas las cosas»”.
[4]– Al-Baqara [2:38]. –«فمن تبع هدای فلاخوف علیهم...» .
[5]– Bihâr Al-Anwâr, t.74, p.88.
[6]– Ať-Ťalāq [65:3]. –«ومن یتوکل علی الله فهو حسبه»
[7]– At-Tauba [9:103]. –«ان صلوتک سکن لهم»
[8]– Ar-Rūm [30:21].
[9]– Iūnus [10:67] –«هو الذی جعل لکم اللیل لتسکنوا فیه»
[10]– Bihâr Al-Anwâr, t.73, p.323.
" عَنْ بَكْرِ بْنِ صَالِحٍ عَنْ أَبِي عَبْدِ اللَّهِ ع قَالَ شَكَا نَبِيٌّ مِنَ الْأَنْبِيَاءِ إِلَى اللَّهِ الْغَمَّ فَأَمَرَهُ بِأَكْلِ الْعِنَبِ".
[11]– Ídem, t.76, p.84; Al-Jisâl. –قال علی (ع): غسل الثیاب یذهب بالهم و الحزن.
[12]– Ídem, t.76, p.323. –قال الصادق (ع): "من وجد هما فلایدری ما هو فلیغسل رأسه".
[13]– Ídem, t.73, p.91. –قال رسول الله (ص): "الرغبة فی الدنیا تورث الغم و الحزن، و الزهد فی الدنیا راحة القلب و البدن".
[14]– Imam Jomeînî, La promesa del encuentro, carta 16/7/1984.
[15]– Bihâr Al-Anwâr, t.77, p.172. –قال رسول الله (ص): "من نظر الی ما فی ایدی الناس، طال حزنه و دام اسفه".
[16]– Ídem, t.73, p.256.
[17]– Ídem, t.77, p.61; Tuhaf Al-‘Uqul.