Según las investigaciones realizadas por los expertos y economistas[1] respecto al conocimiento de la naturaleza de las empresas piramidales, tales como GoldQuest, GoldMine y otras, sus operaciones, las actividades de estas empresas y colaborar con ellas, tiene numerosas dificultades, que desde esta perspectiva provocaron pérdidas irreparables a la economía del país. Por ello las instituciones de economía de la República Islámica de Irán anunciaron ilegales las actividades de este tipo de empresas, y el Poder Judicial de la República Islámica de Irán está obligado a enfrentar a los violadores. Algunas de estas pérdidas corresponden a:

1. En este tipo de empresas el 35% del monto total de la inversión de cada miembro es depositado en la cuenta de la empresa, y el 65% restante regresa a los clientes (esto en caso de que pueda presentar a nuevos clientes en forma completa según lo requerido), que este monto corresponde al precio verdadero de las monedas de oro, de los productos comprados y de los porcentajes pagados a los intermediarios.

Ahora si este asunto lo computamos en forma global en un país como Irán, que según lo que muestran las estadísticas en estos momentos más de un millón de personas se encuentra en estas redes, y si consideramos que cada persona por lo menos haya invertido 500 dólares, en total en estas empresas se invirtió aproximadamente 500 millones de dólares, que el 35% pertenece a estas empresas (aparte de las ganancias que obtienen por otros medios y en las transacciones que realizan), es decir una cantidad aproximadamente 175 millones de dólares.

Este número y cantidad es en caso de que a los clientes los consideramos 1 millón y la cantidad invertida por cada cliente la consideremos la mínima a invertir. Pero por desgracia el número de clientes supera a este número y también un gran número de clientes invirtió más de 500 dólares.

Considerando esto se evidencia que gran cantidad de la inversión del país fue enviada al extranjero y depositadas en la cuenta de estas empresas sin que el país tenga ninguna ganancia.

La salida de esta gran inversión ocasionó una gran pérdida al país, y así como dañar a alguien es prohibido, dañar al país islámico también es prohibido (puesto que es un daño realizado a todas las personas) y ninguna persona consciente acepta una pérdida así.

2. Cuando esta cantidad de dinero que debería invertirse en la bolsa del país sale del sistema de la bolsa interna, provoca el incremento del monto de los interés de las inversiones internas y, en conclusión, el déficit de la ganancia de las producciones internas e incremento en el precio de los productos del país, provocando una gran pérdida en los productores y en los consumidores. Explicado de otra manera, abre el sendero para la entrada de productos extranjeros, y en conclusión las fábricas del país se enfrentan a la estancación, y con la estancación y el cierre de las fábricas un gran número de trabajadores queda sin trabajo y…

3. No existe seguridad en la inversión de este tipo de empresas ya que el Poder Judicial ante las violaciones y el abuso de las inversiones en este tipo de empresas no tiene ninguna responsabilidad. En efecto si uno de los miembros se queja de su jefe de grupo pudiendo comprobar su pretensión es posible tratar este litigio en el juzgado. Pero en caso de que la persona por voluntad propia haya depositado su dinero en una de estas empresas piramidales y lo pierda de alguna forma (la empresa no cumpla con sus responsabilidades) el Poder Judicial de la República Islámica no tiene ninguna responsabilidad ante la recuperación de los que perdieron su inversión.

Tal y como otros países y otras comunidades jurídicas tampoco tienen ninguna responsabilidad en este campo, y si la tuviesen para actuar a través de ellos y recuperar su derecho, no vale la pena (el costo de las audiencias y de los abogados, de ir y venir es muy alto).

4. El producto que venden bajo el título de moneda de oro u otro producto a los clientes, es una moneda que el mismo cliente puede comprarla directamente de la empresa fabricante en Alemania a un precio mucho más barato (aproximadamente 90 dólares). Y esa pretensión de que estas monedas son fabricadas y selladas por la propia empresa y son exclusivas, que tendrán un precio de colección, es algo infundado. Puesto que, primero: su producción no es exclusiva. Como ejemplo: La Fundación de Publicaciones de las obras del Imâm Jomeînî vendió a una compañía alemana la concesión limitada de la acuñación de la moneda de oro con la imagen del Imâm Jomeînî (r.). Esa compañía alemana acuño monedas en un número limitado y las introdujo en el mercado. Un número de éstas fue comprado por la Empresa GoldQuest quien las puso a disposición de sus clientes. La Fundación de Publicaciones puede vender esta concesión a otros y cualquiera puede directamente comprar estas monedas de la compañía productora.

Segundo: Un producto encuentra el valor de colección cuando por lo menos tenga decenas de años de antigüedad y no se produzca más, mientras que esto no sucede con los productos de las empresas piramidales.

Los marâÿa’ taqlîd, respaldándose en lo arriba mencionado y otras razones jurídicas consideraron prohibida la ganancia de empresas como éstas. Lo que a continuación mencionamos son algunas de las razones:

1. El porcentaje que se paga en estas empresas se obtiene de los nuevos clientes y si esta operación en alguna parte se corta, que definitivamente se corta, las personas que son nuevos clientes pierden una gran parte de su inversión, y no obtienen nada (sólo moneda y un poco de porcentaje).

2. Aquellos que se encuentran como jefe de grupo o intermediario trabajan con estas empresas y reciben porcentaje en caso de que puedan traer a nuevos clientes. Mientras presenten más clientes, reciben más dinero, pero en realidad ellos reciben el sueldo de la seducción y el engaño de sus nuevos clientes, es decir a los nuevos clientes y a los nuevos miembros los engañan para que tengan confianza en la empresa y su inversión en esta transacción, que en realidad es pillar los bienes de estos, para que los pongan a disposición de la empresa, y a cambio la empresa paga una mínima parte de este dinero a los intermediarios y lo demás sin ningún esfuerzo lo toma para sí misma, que este acto desde la ley religiosa es prohibido «اکل مال به باطل» (consumir los bienes de otros por un sendero falso).

Esto fue sólo parte de las razones ilegales e irreligiosas de estas empresas. Los daños y la corrupción de estas empresas es más de lo aquí mencionado.