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La religión del Islam es la última, la más perfecta y más completa religión celestial. Por ello las enseñanzas islámicas prestan atención en todos los aspectos de la vida particular-social del ser humano en todas las épocas y en todo lugar, respondiendo a sus necesidades. De cualquier manera uno de los asuntos que la religión del Islam determinó para esta costumbre y método, es usar zapatos que realizar esta costumbre es considerado el agradecimiento de una bendición. Una costumbre del uso de calzado en forma correcta, es no calzarlo estando parado, y…
La religión del Islam es la última, la más perfecta y más completa religión celestial.[1] Por ello las enseñanzas islámicas ponen atención en todos los aspectos de la vida particular-social del ser humano en todas las épocas y en todo lugar, respondiendo a sus necesidades. Debe ponerse atención en este punto que no debe imaginarse que ya que el Islam es una religión completa entonces deberá tener también una obligación determinada para todos los detalles[2], sino que al mostrar las normas y los criterios generales y las pruebas textuales y argumentos raciones en algunos de los detalles y asuntos que en cualquier época surgirán en forma de un nuevo asunto, cedió su propósito al pensamiento del ser humano, y éste deberá, al obtener y entender en forma correcta estas normas, criterios y iÿtihâd (deducción de las normas islámicas), alcanzar los mandatos y la órdenes Divinas.[3]
Claro está la religión del Islam se introdujo en algunos detalles y para ellos determinó costumbres y método, es usar zapatos que realizar esta costumbre es considerado el agradecimiento de una bendición.
Un debate respecto al uso de zapatos y sus costumbres en forma resumida es el siguiente:
Uno. El uso del zapato: En el Islam fue considerado cubrir el pie. Con relación a esto el Imam Bâqir (a.s.) dijo: “Calzar juf (un tipo de zapato cómodo) incrementa la luz de los ojos”.[4] Así también el Imam Sâdiq (a.s.) dijo: “Perseverar en calzar juf evita que la persona se vea contagiada de lepra”.[5] Y juf en la lingüística significa cualquier cobertura que cubra las dos partes del pie, cubra hasta la pantorrilla o hasta el empeine.[6] Al contrario de na’layn [7] (sandalias que generalmente usan los maulas) que no cubre todo el empeine del pie. Se ha dicho que juf es más grande que el na’layn.[8]
Dos. La importancia de un buen zapato: A este respecto el Imam ‘Alî (a.s.) en una reunión dijo a sus seguidores. “El buen calzado protege el cuerpo, ayuda para la oración y es higiene”.[9]
Tres. Las especificaciones de un buen calzado: El Imam ‘Alî (a.s.) prohibió usar zapatos que no sean fuertes y duraderos.[10] El Imam Sâdiq (a.s.) en una narración usar zapato negro lo consideró desagradable y recomendó usar zapato de color amarillo[11] o blanco[12], que usar cualquiera de estos tiene una recompensa especial.
Cuatro. Costumbre y método de calzar el zapato: En los hadices fueron mencionadas costumbres y métodos para calzar el zapato, que aquí indicamos algunas de éstas:
1. El zapato debe ser calzado en la forma correcta.[13]
2. No lo calce cuando se encuentra parado.[14]
3. Evite caminar con sólo un zapato puesto.[15]
4. Calce primero el pie derecho, y descalce primero el del pie izquierdo.[16]
5. Al calzar el zapato recitar esta súplica:
«بِسمِ الله، اللَّهُمَّ صَلِّ عَلَى مُحَمَّدٍ وَ آلِ مُحَمَّدٍ وَ وَطِّئْ قَدَمَيَّ فِي الدُّنْيَا وَ الْآخِرَةِ وَ ثَبِّتْهُمَا عَلَى الصِّرَاطِ الْمُسْتَقِيمِ يَوْمَ تَزِلُّ فِيهِ الْأَقْدَام»
“En el nombre de Dios, ¡Dios mío envía salud a Muhammad y a su familia, y Haz que mis pasos sean firmes tanto en este mundo como en la otra Vida, y el día en que los pasos se resbalarán, mantén mis pasos firmes en el sendero recto!”
Y al sacar los zapatos recitar esta súplica:
«اَلحَمدُ لِلّهِ الَّذِی رَزَقَنِی مَا اَوقِی بِهِ قَدَمَی مِنَ الاَذَی، أللّهُمَّ ثَبِّتهُمَا عَلَی صِرَاطِکَ المُستَقِیمِ، یَومَ تَزِلُّ فِیهِ الأقدَامِ، وَ لا تَزِلُّهُمَا عَنِ الصِّرَاطِ المُسَوّی»
“Agradezco a Dios que me otorgó un calzado para proteger mis pies de las molestias. ¡Dios mío, el día en que los pasos se resbalarán, mantén mis pasos firmes en el sendero recto, y no los hagas resbalar del sendero recto”.[17]
[1]– Recurrir a los Índices: “Razones de la veracidad del Islam”, preg.no. 12439 (pág.web es12216); “El Islam y la racionalidad”, preg.no. 9332 (pág.web es9361).
[2]– Mutaharî Prof. Mártir Murtiâ, Colección de las obras, t.21, pp.193-195.
[3]– Recurrir a los Índices: “El Corán y el iÿtihâd (deducción de las normas islámicas)”, preg.no. 9537 (pág.web es9515); “Causa de la falta de mención del dictamen de algunos asuntos en la religión”. preg.no.6362 (pág.web 6545).
[4]– Sheij Sadûq Muhammad Ibn ‘Alî, Zawâb Al-A’mâl wa ‘Iqâb Al-A’mâl, p.25.
[5]– Ídem.
[6]– Taraîhî Fajr Al-Dîn, Maÿma’ Al-Bahraîn, t.5, p.49.
[7]– Ÿuharî Ismâ’îl Ibn Hamâd, Al-Sahâh –Tâÿ Al-Lugat wa Sahâh Al-‘Arabîîah, t.5, p.1831.
[8]– Ábu Al-Husaîn Ahmad Ibn Fârs Ibn Zakariya, Mu’aÿim Maqâ’îs Al-Lugah, t.2, p.154.
[9]– Kulaînî Muhammad Ibn Îa’qub, Al-Kâfî, t.2, p.462.
[10]– Ídem, t.6, p.463.
[11]– Zawâb Al-A’mâl wa ‘Iqâb Al-A’mâl, pp.24-25.
[12]– Ídem, p.24.
[13]– Sheîj Sadûq Muhammad Ibn ‘Alî, Min lâ Îahdarah Al-Faqîh, t.3, p.555.
[14]– Sheîj Sadûq Muhammad Ibn ‘Alî, Al-Jasâl, t.2, p.521.
[15]– Al-Kâfî, t.6, p.534.
[16]– Tabarsî Fadl Ibn Hasan, Al-Âdâb Al-Dînîîah lil Jazânat Al-Mu’aîanîîah, p.60.
[17]– Ídem.