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Nosotros sostenemos que el Corán goza de perfección y puede resolver todos los problemas de la humanidad. Pero esta pretensión no significa que debemos esperar del Corán la solución de todos los asuntos, inclusive la solución de asuntos como la física y otros.
El Generoso Corán es el Libro de la Guía para toda la gente, y fuera de esto no tiene otro propósito. Naturalmente sólo en este campo debe esperarse de este Libro que cuente con perfección, y no negar a la humanidad ni si quiera un puno de la guía que necesita. Claro está nosotros afirmamos que el Corán realizó ese acto en forma perfecta y mencionó todo aquello que la humanidad necesita para la guía y para solucionó los problemas. De cualquier manera es importante poner atención en este punto que la religión vino para conceder al hombre aquello que no puede alcanzar por sí mismo. Dios otorgó al ser humano intelecto, razón y pensamiento, y ciertamente la religión no tiene la intención de terminar con estas capacidades humanas; puesto que lo necesario es que la creación de los sentidos, del intelecto y de la experiencia de la humanidad sean útiles. Parte de la respuesta a su pregunta puede encontrarla en el índice: Teoría del pensamiento colectivo en el Islam, pregunta 900 (página web, preg.988)
Parece necesario mencionar este punto que el Corán, puesto que es el Libro de la Guía, no tiene diferencia y es similar a los otros Libros Celestiales, con la única discrepancia de que por ser perfecto es superior a los otros Libros Celestiales.
Le agradecemos que, en sus esfuerzos por encontrar y entender la verdad, considerara a nuestra página digna de responder a su pregunta. Poner atención en algunos puntos puede ayudarnos para obtener la respuesta:
1. Nosotros los musulmanes sostenemos que el Corán goza de perfección, pero esto no significa que podamos esperar del Corán la resolución de todos los problemas.
Aunque se han realizado numerosos análisis por parte de los sabios acerca de la perfección del Corán, pero por lo general a la perfección de este Libro Sagrado la consideraron en dirección hacia los propósitos de la religión[1] y como un asunto adicional y relativo.
El Generoso Corán es el Libro de la Guía para toda la gente, y fuera de esto no tiene otro propósito. Por eso, en el Corán existe todo aquello que incumbe a la guía, por ejemplo los conocimientos reales que corresponden al origen del hombre, al día de la Resurrección, a las virtudes, a las leyes Divinas, a las historias y a los consejos que la gente necesita para ser guiada y para encontrar su camino.[2] La religión vino para dar al hombre aquello que no puede alcanzar por sí mismo. Básicamente el rango del Generoso Corán así como la religión, no es que intervengan en los asuntos que corresponden a los descubrimientos de la humanidad; puesto que Dios otorgó al ser humano intelecto, razón y pensamiento.[3] Ciertamente la religión no tiene la intención de terminar con estas capacidades humanas; porque lo necesario es que la creación de los sentidos, del intelecto y de la experiencia de la humanidad sean útiles.[4] El Generoso Corán estableció las bases de su programa sobre la teología, y a la creencia de la Unicidad de Dios la consideró como el primer fundamento de la religión. Después de presentar a Dios dedujo de ésta la escatología (creencia del día de la Resurrección donde el hombre recibirá el premio y el castigo de sus buenos y malos actos) y colocó otro fundamento. Después de esto de la escatología dedujo la profecía. Puesto que la recompensa de los buenos y malos actos, sin una notificación anterior –la obediencia y la desobediencia buena y mala– no se realiza a través de la revelación ni de la profecía y esto lo consideró también como otro fundamento. En conclusión a la creencia de la Unicidad de Dios, y a la creencia de la Profecía y de la Resurrección las consideró como los fundamentos de la religión del Islam.
Luego mencionó los fundamentos de una moral aceptable y los atributos positivos concordantes con los tres fundamentos que el hombre realista y creyente debe tener y poseer estas características. Después fundamenta y menciona las leyes prácticas, que en realidad protegen la felicidad verdadera y son creadoras y desarrollan la moral aceptable y, aún más, son el factor del desarrollo y el avance de las creencias verdaderas y de los primeros fundamentos. La moral aceptable queda siempre viva a través de una serie de actos adecuados. Tal como la moral aceptable respecto a las creencias principales conserva esta misma situación. Por ejemplo, aquel que no conoce otra más que la arrogancia, la vanidad, el egoísmo y la superioridad, no puede esperarse de él la creencia en Dios ni la humildad ante el rango Divino, y alguien que durante toda su vida no entendió el significado de equidad, generosidad, clemencia y afabilidad, no puede tener fe en el día de la Resurrección ni en el de las Cuentas.[5]
El Generoso Corán contiene el propósito perfecto de la humanidad y lo menciona en la forma más perfecta; por lo tanto el propósito de la humanidad que, mezclado con el realismo es esa misma concepción del mundo perfecto, necesita de la utilización de los fundamentos morales y de las leyes prácticas adecuadas a él, y el Generoso Corán asume la explicación completa de este propósito. Dios Sublime lo describe de la siguiente manera: «[El Generoso Corán] Guía a la Verdad [en la creencia] y a un camino recto [en la práctica]».[6]
2. El Corán, puesto que es el Libro de la Guía no tiene diferencia y es similar a los otros Libros Celestiales, con la única diferencia de que el Corán es superior a los otros Libros.
Explicación: El Corán contiene la verdad de los propósitos de todos los Libros Celestiales y mencionó en forma completa y perfecta todo aquello que la humanidad necesita para recorrer el sendero de la felicidad en el campo de las creencias y de la práctica”.[7] Desde el punto de vista del Corán, la religión de Dios desde Adán hasta el último Profeta es la misma. Todos los Profetas tanto los Profetas poseedores de una ley Divina así como los Profetas que no la poseen, invitaban a una misma Escuela. El Corán enfatizando en esta verdad dice:
«Él ha establecido para vosotros los mandatos de la fe que ya había encomendado a Noé y que también Nosotros te hemos revelado a ti, y lo que habíamos encomendado a Abraham, Moisés y Jesús».[8]
Las diferencias de las leyes Divinas celestiales pueden mencionarse en los siguientes puntos:
A) Difieren en una serie de asuntos secundarios de acuerdo a las exigencias del tiempo, características del ambiente y especialidades de la gente invitada. Mientras que todas las diferentes formas y los diversos cuerpos se dirigían hacia una verdad y hacia una misma meta y propósito.
B) Los Profetas siguientes, paralelos a la perfección de la humanidad desde la perspectiva intelectual, presentaron sus enseñanzas, todas éstas en un mismo campo y en un grado superior.
Esta es la perfección de la religión, no diferencia entre las religiones. Por ello los Profetas anteriores fueron anunciadores de los Profetas venideros, y los Profetas posteriores confirmaron y atestiguaron a los Profetas anteriores.
El Generoso Corán dice: «Hicimos descender para ti la Escritura que contiene la Verdad y que confirma la Escritura que ya tenían en sus manos y la protege».[9]
"مهیمن" significa cuidar, proteger y presente, y si el Corán fue considerado "مهیمن" sobre los demás Libros Celestiales, quiere decir que, primero: es su protector, que comprueba y confirma la existencia de estos (Libros Celestiales); segundo: los protege y domina sobre estos, y menciona todos aquellos errores, alteraciones y omisiones que ocurrieron en esos Libros.[10] Esto sin duda, además de la ley Divina y los mandatos religiosos, incluye también los asuntos generales de las creencias.
[1]– Por ello cuando se dice que la religión del Islam cuenta con perfección, el propósito no es decir que a través de la religión se mencionaron todos los asuntos teóricos y prácticos que están relacionados con la vida material y espiritual del ser humano, ya sea en el grado de los asuntos mayores y generales, o en el campo de los asuntos particulares y triviales. Sino que el propósito es que la religión en la meta y misión que tiene, es decir, guiar al ser humano hacia su perfección verdadera y multilateral no mostró negligencia en la mención de ni siquiera un punto.
Pero habrá que poner atención en que dos formas pueden suponerse para la religión, el propósito y la misión:
(A) El propósito y la misión eterna y estable (propósito principal), que no es especial de ninguna época, historia o región geográfica.
Guiar a la razón y al sentimiento (es decir evidenciar el sendero para llegar al conocimiento de los sentidos y de la razón) y perfeccionar el conocimiento humano (es decir explicación para el hombre de los horizontes de la verdad que se encuentran fuera del alcance de la razón y de los sentidos) son dos propósitos que caben en este debate y la humanidad en estos dos campos siempre necesita de la religión.
(B)´El propósito y la misión temporal e inestable (propósito secundario); como la presentación de técnicas especiales concordantes con algunas las condiciones especiales temporales y locales, así como la exposición de algunos asuntos científicos y mentales en una época especial y para un grupo de seres humanos en condiciones especiales.
Es evidente que, al cambiar las situaciones temporales y locales las técnicas presentadas por la religión ya no serán efectivas, y puesto que ya no son considerados propósitos eternos y estables no habrá que insistir en esas técnicas. La religión no quiso ni vino para terminar con la razón ni con los pensamientos de los humanos. La misión de la religión no es colocar a la revelación en lugar de la razón, sino que la misión de la revelación es, primero: evidenciar el sendero para llegar a los conocimientos racionales y clarificar la experiencia. Y, segundo: evidenciar los horizontes de la verdad que se encuentran fuera del alcance de la razón y del sentido. Recurrir a: Rabbânî Golpaîgânî ‘Alî, La universalidad y la perfección de la religión, pp.16-17.
Sobre estas bases habrá que recurrir a la religión en los propósitos estables, y en los propósitos inestables habrá que recurrir a la razón y al sentido.
Pero el mecanismo especial existente en el sistema de la legislación islámica, a través del cual pueden unirse dos asuntos fijos y variables en cuanto a la religión y la vida humana, y colocase en un mismo lugar, son las cinco bases que corresponden a: (1) mandatos primordiales y secundarios; (2) legislación de la deducción de las normas en el Islam; (3) el papel importante que juega la razón en la deducción de las normas islámicas; (4) las normas de los mandatos y la regla de lo más importante y de lo importante; (5) las responsabilidades y autoridades que tiene el gobernador islámico. Recurrir a: Ídem, pp.77-94.
Le recomendamos leer el Índice: Teoría del pensamiento colectivo en el Islam, pregunta 900 (página web, preg.988)
[2]– Tabâtabâî Saîîed Muhammad Husâîn, Exegesis Al-Mizân, t.12, p.347.
[3]– Ma’rifat Muhammad Hâdî, La universalidad del Generoso Corán respecto a la ciencia y el conocimiento de la humanidad, revista trimestral, núm.6, p.6.
[4]– Ma’rifat Muhammad Hâdî, La crítica y la opinión, revista trimestral, núm.1, pp.63-64.
[5]– Dios Todopoderoso respecto a la relación de las creencias verdaderas y de la moral aceptable acompañada de la práctica dice: »A Él asciende la buena palabra (creencia) y la obra recta la eleva« (35:10). Es decir en el ascenso la creencia ayuda. Así también respecto a la relación de la creencia con la práctica, dijo: « Luego, el final de quienes hicieron el mal fue desmentir las señales de Dios y burlarse de ellas» (30:10).
[6]– Sagrado Corán 46:30.
[7]– Exegesis Al-Mizân, t.15, p.47.
[8]– Sagrado Corán 42:13.
[9]– Sagrado Corán 5:48.
[10]– Qurshî Seîîed ‘Alî Akbar, Qâmûs Qurân, t.7, p.166. El famoso jurista shi’íta, difunto Kâshif Al-Gatâ’, a este respecto dijo: “Si no hubiesen existido el Mensajero del Islam (s.a.w.) ni el Corán, no hubiesen quedado señales del cristianismo ni judaísmo; porque la Tora y los Evangelios fueron alteradas, y nunca podrán sobrevivir ni continuar, ya que en una explicación presentan a Dios ante Jacobo para luchar, y a los Profetas (a.s.) como bebedores, y a las mujeres puras bajo calumnias. El Generoso Corán acompañado con la divulgación del monoteísmo, aleja a todos los Profetas (a.s.) de este tipo de acusaciones, y a Abraham (a.s.) amigo de Dios y demás Profetas (a.s.) los elogia con honor y grandeza, y a la Virgen María la recuerda pura e íntegra. El Generoso Corán purifica también a los Libros Celestiales de los Profetas anteriores de las alteraciones realizadas en estos… Además de purificar los Libros Celestiales de las alteraciones fundamentales, los purificó también de las alteraciones en las ramas de la religión. Recurrir a: Ÿawâdî Âmulî ‘Abdul.lah, La Sharîah en el espejo del conocimiento, pp.105-106.