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Cuando los seguidores de Cristo se vieron desprovistos de la presencia bendita de este Profeta Divino, y su Profeta (a.s.) ascendió a los Cielos, los mensajeros y apóstoles de Jesús (a.s.) se dedicaron a propagar la religión de Cristo soportando muchos sufrimientos.
Después de un corto tiempo “Pablo” (c.10-62) –que debe ser considerado como el fundador del cristianismo actual– tomó en sus manos el liderazgo del cristianismo. El era judío y constantemente molestaba a los cristianos, pero cuando se convirtió en cristiano pudo influir en la gente. Visitaba las ciudades como mensajero cristiano y propagaba esas creencias al mismo tiempo que las alteraba.
En la edad media los intelectuales cristianos se esforzaron para, en una forma, justificar las creencias desviantes existentes en el cristianismo actual, y describir una forma razonable de éste. Pero a pesar de todo esto, unos significados de El Nuevo Testamento no podían ser justificados racionalmente, y a pesar de todos los esfuerzos que los filósofos de la edad media tales como “Tomás de Aquino” (c.1225-1274), no pudieron presentar en forma racional todo aquello que mostraba el Libro Sagrado.
Después de la edad media con de la aparición de las nuevas ciencias, y al enfrentarse éstas con la imagen que la iglesia y El Nuevo Testamento –con una interpretación de la Iglesia– mostraba de los significados científicos, se presentó el asunto de la contrariedad entre la ciencia y la religión, y como consecuencia del esplendor y el florecimiento de las nuevas ciencias, la lámpara de la religión cristiana se fue apagando. Mientras tanto, los teólogos así como los sacerdotes cristianos se esforzaron ante esta crisis y propusieron nuevos debates para defender al cristianismo y proteger la fe de la gente. Después los filósofos de la religión también, cada uno en su forma, se dedicaron a debatir y analizar respecto a este asunto, que una serie de este tipo de debates, compone la identidad de los pensamientos cristianos en el siglo contemporáneo.
El pensamiento cristiano desde su inicio hasta hoy día ha tenido una larga historia. Para poder hasta cierto punto familiarizarnos con la atmósfera de pensamiento de los intelectuales occidentales, señalamos un método general de éste.
Cuando los seguidores de Cristo (a.s.) se vieron desprovistos de la presencia bendita de este Profeta Divino, y su Profeta (a.s.) ascendió a los Cielos[1], los mensajeros y apóstoles de Jesús (a.s.) se dedicaron a propagar la religión de Cristo (a.s.) soportando muchos sufrimientos.[2]
Después de un corto tiempo “Pablo” (c.10-62) –que debe ser considerado como el fundador del cristianismo actual– tomó en sus manos el liderazgo del cristianismo. El era judío y constantemente molestaba a los cristianos, pero cuando se convirtió en cristiano pudo influir en la gente.[3] Visitaba las ciudades como mensajero cristiano y propagaba esas creencias al mismo tiempo que las alteraba [4]
En un principio la religión de Jesús (a.s.) era en otra forma y Pablo la convirtió en la que actualmente tiene. El, que no se preocupaba por lo que dijo Jesús (a.s.)[5], imitó de las creencias de los politeístas asuntos tales como la divinidad de Jesús, su ofrecimiento por los pecados humanos y la implantación de la ley religiosa, y los agregó al cristianismo.[6] Con esta explicación Jesús (a.s.), que era mensajero de Dios, se convirtió en dios. El dios que había venido para ser crucificado y a través de su crucifixión limpiar los pecados de sus seguidores. Por ello, la crucifixión de Jesús (a.s.) es considerada en el cristianismo con un significado y como una creencia importante, que si un cristiano lo refuta y acepta lo dicho por el Corán que Jesús (a.s.) ascendió a los cielos antes de su muerte, ya no puede aceptar el cristianismo existente, sin tener otra alternativa más que aceptar el Islam.
Por otra parte el movimiento iniciado por Jesús (a.s.) para reformar las falsas creencias expandidas entre los judíos, al negar la ley religiosa (sharîah)[7] que forma el estatuto de la religión en el ámbito de la práctica, se vio afectado por una doble desviación. En la cultura cristiana términos tales como “obligatorio”, “prohibido” y “permitido” perdieron su significado así como la obligación en forma especial del acto en los diversos asuntos. Por ello mientras que nosotros, por ejemplo, somos testigos de costumbres y situaciones especiales de como degollar a los animales entre los judíos, ente los cristianos no existe ningún rito en este caso. Todos estos asuntos provocaron que el cristianismo al paso del tiempo se distanciase en forma considerable de los verdaderos significados de las religiones monoteístas.
El Libro Sagrado de los de los cristianos, La Biblia, se enfrenta también a dificultades fundamentales. Por una parte las Biblias existentes no cuentan con un documento histórico que las respalde, y según lo confesado por los mismos investigadores occidentales[8] fueron escritas mucho tiempo después del ascenso de Jesús (a.s.) y dentro de la corriente de las actividades, enfrentamientos e influencia de los pensamientos de “Pablo” e inclusive después de esto –cuando sus creencias desviantes dominaron la sociedad. Por otra parte el contenido y la construcción de estas Biblias no son compatibles con los Libros Sagrados ni la Revelación Divina, y presenta en forma de un libro de sirah (biografía) el relato la vida de Jesús (a.s.). A pesar de que pueden encontrarse frases de lo dicho por Jesús (a.s.), sin embargo la construcción general del Libro es una exposición de la biografía de Jesús (a.s.). Por ello a pesar de lo que confiesa el propio Sagrado Corán, que Jesús (a.s.) es un profeta divino y dueño del Libro llamado Biblia, pero no pueden encontrarse restos de sus enseñanzas en el cristianismo actual ni tampoco pueden encontrarse muchas señales de su Libro verdadero.
En la edad media los intelectuales cristianos se esforzaron para, en una forma, justificar las creencias desviantes existentes en el cristianismo actual, y describir una forma razonable de éste. Tomás de Aquino (que vivió en el siglo 13 d.C.) es considerado el campeón de la escena de esta discusión católica. El trató, ayudándose de la filosofía de Aristóteles –que conoció a través de las obras de Avicena y de la cultura Islámica–de reconstruir los pensamientos cristianos así como crear compatibilidad entre esta filosofía y la teología cristiana.[9] Pero a pesar de todo esto algunos de los significados y contenidos de La Biblia no podían ser justificados razonablemente y a pesar de todos los esfuerzos realizados por los filósofos de la edad media tales como Aquino, no pudieron dar forma razonable a aquello que había en el exterior del Libro Sagrado.
En forma de ejemplo, los cristianos creen que Jesús (a.s.) es el hijo de Dios y aparentemente la trinidad en La Biblia es que Jesús (a.s.) es el mismo Dios. Para justificar esto –en tal forma que se adapte tanto con el monoteísmo así como con La Biblia y con las creencias de éstos– dijeron que Dios tiene tres personalidades pero es una naturaleza. El Padre, el hijo y el espíritu santo, tres personalidades y tres cuerpos. Es evidente que esta creencia y otras parecidas a ésta no pueden ser correctas ni justificarse a través de la razón.[10] Ya que si una naturaleza posee tres personalidades deberá aceptarse que en esa naturaleza tres personas tienen participación. Este asunto por una parte tiene para Dios la existencia de substancia y por otra es incompatible con la esencia monoteísta de Él.
Además de las dificultades en el campo de la credibilidad e historia que existen en el cristianismo, en la época anterior al renacimiento que es llamada la época de la oscuridad, los clérigos cristianos encontraron un lugar importante dentro de la política, y al presentarse bajo el nombre de “mediador entre Dios y la gente”, pretendieron un derecho especial privado para sí mismos que uno de éstos es el dominio y la soberanía sobre la gente así como la obligación del obedecimiento por parte de ésta. Este grupo procedió a establecer la ley canónica para administrar los asuntos y se esforzó para compensar las deficiencias del cristianismo en el área de la ley canónica, con leyes establecidas por ellos mismos y consideradas como religiosas.
Por otra parte, después de la edad media, de la aparición de las nuevas ciencias y la confrontación de ésta –con lo expuesto por la iglesia– con el significado científico que presentaba, se presentó el asunto de la contrariedad entre la ciencia y la religión, y como consecuencia del esplendor y el florecimiento de las nuevas ciencias, la lámpara de la religión cristiana se fue apagando. Mientras tanto, los teólogos así como los sacerdotes cristianos se esforzaron ante esta crisis y propusieron nuevos debates para defender al cristianismo y proteger la fe de la gente. Después los filósofos de la religión también, cada uno en su forma, se dedicaron a debatir y analizar respecto a este asunto, que una serie de este tipo de debates, compone la identidad de los pensamientos cristianos en el siglo contemporáneo.[11]
Fuentes para mayor estudio:
- Mahdî Hâdavî Tehrânî, Wilâîat va Dîyânat, Instituto de Cultura Janeîe Jirad, Qom, segunda edición, 2001.
- Mahdî Hâdavî Tehrânî, Mabânî Kalâmîe Iytihâd, Instituto de Cultura Janeîe Jirad, Qom, primera edición, 1998.
[1]– Según la creencia de los musulmanes y el texto claro del Sagrado Corán, este Profeta (a.s.) no fue crucificado, y ascendió a los cielos estando vivo. Pero según la creencia de los cristianos Jesús (a.s.) fue crucificado y enterrado y después de esto resucitado. Luego de 40 días o 3 días –según lo registrado en las diversas Biblias– se presentaba ante los apóstoles y después ascendió a los cielos. Recurrir a: El Sagrado Corán, sura An-Nisâ (4), alejas 157-158; Biblia de Lucas, 24; El Nuevo Testamento, los Hechos de los Apóstoles, 1.
[2]– Recurrir a: El Nuevo Testamento, libro de los Hechos de los Apóstoles.
[3]– Para más información de la historia de la fe de Pablo, recurrir a: El Nuevo Testamento, libro de los Hechos de los Apóstoles, capitulo noven en adelante.
[4]– En las fuentes islámicas existen narraciones que Pablo se encuentra a la altura de tales como el Faraón, Namrud, y dice que estos individuos sufren el castigo en el peor lugar y en la peor situación en el Infierno. Recurrir a: Maylisî, Bihâr Al-Anwâr, t.8, p.311.
[5]– Humphrey Carpenter, Jesús, p.154.
[6]– Algunos de los investigadores occidentales clarificaron este asunto. Recurrir a: John Binas, Historia complete de las religiones, p.617, y al Libro Sagrado, El Nuevo Testamento, libro de Pablo, Carta a los Gálatas, 1ª. Carta de los Corintios, 1ª. Carta a Timoteo; Humphrey Carpenter, Jesús, p.154.
[7]– La "sharî’ah” (ley religiosas) es parte de la religión relacionada con la conducta de los seres humanos respecto a Dios, con los demás seres humanos, con la naturaleza y con sí mismos. Esta parte es también llamada “fiqh” (jurisprudencia religiosa).
[8]– Proclaman que estas Biblias desde el segundo siglo después de Cristo tienen una cadena ininterrumpida, y se dice que fueron recopiladas y escritas en el primer siglo –aproximadamente entre los años 38 a 100–. Recurrir a: Robert Weir, El mundo religioso, t.2, p.675; y Humphrey Carpenter, Jesús, pp.12-32.
[9]– Recurrir a: John Binas, Historia complete de las religiones, pp.658-660; Robert Weir, El mundo religioso, t.2, pp.733-734.
[10]– Recurrir a: Robert Weir, El mundo religioso, t.2, pp.734-738.
[11]– Recurrir a: Humphrey Carpenter, Jesús, p.160.